Cada uno de los espacios donde trabajamos presenta sus particularidades, lo cual hace que desde Arce Clima tengamos que estar preparados para adaptarnos a ellas. En este caso, el desafío vino dado por tres características de la edificación: sus condiciones geométricas, la altura disponible y la cantidad de locales a climatizar.
El proyecto se encaminó en dos direcciones. Por un lado, debíamos llevar a cabo un diseño más acorde con el uso del edificio; por el otro, hacer un aprovechamiento más racional y eficiente de la energía. Para lograrlo, la decisión de la dirección facultativa fue proceder a la instalación de un sistema de control centralizado encargado de mejorar y ampliar las posibilidades de la instalación.
Las soluciones de Arce Clima a las particularidades del proyecto
Como todos los proyectos llevados a cabo por Arce Clima, la sostenibilidad y la eficiencia energética fueron los dos focos de esta obra. Esto derivó en una instalación compuesta por un bloque a tres tubos en la segunda planta, y otro bloque a dos tubos en el resto de las plantas.
Mientras la instalación a dos tubos proporciona frío o calor, pero no ambos a la vez, la de tres tubos pueden suministrarlos de forma simultánea. Este tipo de instalación añade complejidad al diseño e instalación, pero también versatilidad.
Es habitual que en este tipo de obras surjan imprevistos a medida que el trabajo avanza, desde cambios de diseño hasta los problemas derivados de la propia obra. Tal es el caso del proyecto que nos ocupa.
En un inicio, la instalación de los conductos iba a ser vista, pero la obligación de suministrar aire renovado hizo necesario reconducir el diseño previsto. Como la obra requería de una red de conductos mucho más grande, se decidió hacer un techo de limpieza que alternase conductos vistos con otros que no. Para hacer efectiva dicha renovación de aire en todas las plantas, se instalaron dos recuperadores de calor con una capacidad total de 6.000 m3/h.
Como decíamos al principio de este artículo, una de las singularidades de este edificio era la gran cantidad de estancias en las que está dividido. Los cambios de cubículo frecuentes dificultaron el desarrollo del proyecto ya que, a los ya evidentes cambios de unidades de clima, había que sumarle los tiempos de espera por los cambios físicos realizados por otras empresas.
Sin embargo, esta circunstancia, aún habiendo complicado y causado algunos retrasos en los trabajos, no nos impidió cumplir con el objetivo de plazo de entrega. Todo el equipo se volcó en poder cumplir los plazos sin que ello afectase a la calidad de la obra.
Otra problemática a la que tuvimos que hacer frente fue la que sobrevino en la instalación de los equipos exteriores. Siendo la única ubicación disponible para tal fin el tejado, nos vimos en la necesidad de montar una estructura fijada a las cerchas donde ubicar las unidades. Una solución que resultó ser óptima.
Por otro lado, la red de conductos exteriores y las instalaciones eléctricas y de tubería, además de ser un reto en sí mismas, sumaron la complejidad de no poder soportar ni fijar nada al suelo, ya que el tipo de tejado con el cual cuenta el edificio no lo permitiría. Aún así, nuestro equipo técnico y de obra desarrolló en conjunto una manera muy poco agresiva y muy práctica para solventar el problema, quedando todas las partes muy satisfechas.
La conveniencia de instalar un sistema de gestión BMS
Ya os hemos hablado en anteriores ocasiones del sistema BMS, empleado en obras como la climatización de un nuevo local comercial en Londres o la climatización y protección contra incendios en un local comercial de Brighton. Merece la pena detenernos una vez más en él, pues su instalación es uno de los temas más delicados y a la vez más sobresalientes.
Un sistema BMS, del inglés Building Management System, es un sistema de gestión basado en un software y un hardware que se instala en los edificios, el cual supervisa y controla todos los aspectos referentes a instalaciones: contraincendios, clima, electricidad, calefacción, telecomunicaciones, etc. De esta forma, el cliente puede controlar todos los aspectos de la instalación y recibir diagnósticos remotamente desde un ordenador.
En un proyecto como el que nos ocupa, el sistema BMS es más que recomendable ya que amplía mucho el abanico operacional del sistema. Además, en este caso concreto se añadió un sistema de detección de presencia en cada oficina, para así apagar el equipo en cuestión cada vez que la oficina no estaba siendo ocupada.
El conjunto de todo el equipamiento de control de la instalación nos permite:
- Ahorro energético;
- manejo desde un único punto de todo el sistema;
- amplitud del abanico operacional;
- diagnosis en tiempo real;
- manipulación más sencilla e intuitiva de la instalación;
- etc.
Una obra de referencia
Gracias a un buen diseño y coordinación este trabajo se resolvió con éxito. Es en las particularidades de cada obra donde radica gran parte de su dificultad, y estas exigen una preparación total por parte de todo el equipo de Arce Clima. En el caso de este proyecto quedó demostrada su capacitación para hacer frente a cualquier adversidad e imprevisto. Todas las partes quedaron muy satisfechas con el resultado final y este quedó como un referente para los edificios de la misma tipología en la zona.